Hace algunos días, encontré en mi bitácora- una pequeña libreta verde que hace las veces de agenda, directorio telefónico, base de datos, asistente personal y control de gastos, entre otras funciones, que ha estado conmigo desde hace más de 4 años- mi lista de propósitos de año nuevo 2005.
En dicha lista figuran los propósitos que siendo yo una jovencita llena de ilusiones, me fijé para en futuro cercano. Dado que no hay plazo que no se cumpla, ese futuro ya se acabó y a sólo 2 años y unos pocos meses de distancia puedo congratularme de haberlos cumplido casi todos (bajar de peso e ir a gimnasio no cuentan como planes sino como sueños guajiros).
Si pudiera medir el nivel de éxito de mi vida por el cumplimiento de las metas enlistadas en ese entonces, podría calificar mi vida como un éxito arrollador. Siendo así, compartiré con ustedes mi secreto:
Lo más importante para llegar al éxito, es plantearse metas asequibles. A mi modo de ver, produce la misma satisfacción lograr un propósito difícil que muchos fáciles. Así que la solución al problema del éxito y la satisfacción personal, es fijarse metas y propósitos a prueba de errores y metas tan fáciles que un simio entrenado pueda alcanzar. Lo cual me remite al lema de nuestro blog: We have standards. They're low, but we have them.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario